Aunque es una pieza básica, el sujetador deportivo suele ser el típico detalle que siempre pasamos por alto cuando estamos preparando nuestro equipo para salir a correr y, al contrario de lo que puedas pensar, es algo que ninguna gazella debería hacer.
¿Por qué? Para empezar porque entrenar sin un buen soporte en los pechos puede ser muy incómodo, pero, sobre todo, porque el sujetador deportivo es una prenda que influye mucho en nuestra salud evitando daños innecesarios en el tejido mamario.
Por eso, cuando empezamos en el mundo del running, una de las cosas más importantes de la que debemos preocuparnos es de encontrar un sujetador deportivo que nos siente bien. Y, para que aprendas a elegirlo con criterio, ¡venimos al rescate!
Abróchate el cinturón porque este artículo va a estar cargado de datos e instrucciones, pero lo terminarás de leer siendo toda una experta en sujetadores y sabiendo exactamente en qué tienes que fijarte cuándo vayas a comprar uno.
La importancia de la sujeción
Pensarás que es un tema básico, pero el 44% de las mujeres no usan sujetadores deportivos y, de entre las que los usan, la mayoría no llevan uno adecuado.
Nuestro pecho no está soportado por músculos, ni huesos, ni nada rígido. Solo por unas fibras delicadas (los ligamentos de Cooper) que, si se someten a mucha tensión, pueden ceder o llegar a romperse, lo que causa la caída del pecho incluso cuando este es pequeño.
Una sujeción incorrecta puede además causar pequeñas lesiones internas, en el sistema muscular, o hasta en el nervioso, y la muerte de pequeñas zonas de tejidos internos.
Y, algo que notamos nosotras mismas, es que nos reduce molestias al minimizar el rebote del pecho, al evitar los dolores de espalda en caso de bustos muy grandes, y también nos ayuda a mantener una correcta postura durante el entrenamiento.
Según el tamaño de tu pecho deberás elegir entre unos modelos u otros
Los diferentes tipos
Aunque en las tiendas puedes encontrar muchas marcas y modelos, los sujetadores deportivos se clasifican según el tipo de sujeción, y según el tamaño de tu pecho.
Si nos fijamos en el tipo de sujeción, tendremos 3 tipos de sujetador deportivo distintos:
- De alto impacto. Para deportes que requieren movimientos bruscos como running, tenis, aeróbic, baile…. Estos sujetadores deben limitar al mínimo el movimiento del pecho durante la carrera, saltos o movimientos que se realizan. Suelen tener tirantes gruesos y espalda tipo nadadora para dejar libertad de movimientos y evitar molestias, ya que el peso del pecho se soporta por la musculatura de la espalda, no por la de los hombros.
- De impacto medio. Para actividades no tan exigentes, pero en las que se siguen realizando movimientos enérgicos, como la bici estática, patinar, caminar o hacer pesas. Proporcionan menor soporte que los de alto impacto, pero siguen teniendo unas tiras gruesas y ayudan a que el pecho se mantenga en su sitio.
- De bajo impacto. Los usados para ejercicios en los que los movimientos son suaves y controlados, como el Pilates y el yoga. Estos sujetadores están preparados para sujetar poco, pero proporcionan comodidad y flexibilidad. Suelen tener tirantes finos y regulables y se parecen más a un “top”, así que los diseños también suelen ser los más atractivos.
Y, según el tamaño del pecho, nos encontraremos dos tipos:
- De compresión. Para mujeres con pecho pequeño, de copas A o B. Son modelos ajustados que comprimen el pecho contra el cuerpo.
- De recogimiento. Para copas a partir de la C. Al ser un pecho más grande, comprimirlo hacia atrás sólo provocaría molestias, así que cada pecho se envuelve y sujeta de forma independiente, pero sin apretar.
Tu sujetador ideal no debe apretarte ni rozarte hagas lo que hagas. Si no, durante el entrenamiento irás muy incómoda
¿Cómo escoger mi sujetador deportivo ideal?
Ahora que ya sabes lo básico sobre los sujetadores deportivos, te será mucho más fácil elegir cuando vayas a una tienda. Y, todavía te será más sencillo, después de que leas nuestros últimos consejos de profesional para elegir el sujetador ideal ?:
1. El sujetador que elijas no debe apretarte. Si notas que la goma que rodea el torso te molesta o te corta la circulación, cuando estés corriendo te rozará seguro. Tampoco deben ser más pequeños de lo que necesites. Aunque pienses que así sujetarán aún mejor, puede causarte problemas cervicales y roces en los pezones (nada divertidos).
2. Las costuras y las varillas también serán un punto que puede molestarte durante el entrenamiento y, si tienes el pecho muy grande, huye de las tiras finas, ya que lo más probable es que se te claven.
3. Debes fijarte en que el tejido sea transpirable y preferiblemente, de secado rápido, para prevenir las irritaciones por humedad. Además, el relleno suele dificultar la transpiración, así que evítalo siempre que puedas.
4. No pasa nada por elegir un sujetador de mayor sujeción de lo necesario, siempre que sea cómodo.
5. Y lo más importante, es que te lo pruebes antes de comprarlo, y realices todos los movimientos que harás durante el deporte para comprobar que no te tira ni te roza cuando te mueves, y que sujetan lo suficiente el pecho (no debe botar).
Y, ya para terminar, un tip más: procura cambiar tus sujetadores cada año, o incluso antes si ves que los elásticos ya están cediendo, para que tu pecho esté perfecto mucho tiempo. ¡Cuidar tus sujetadores deportivos como si fuesen la mejor lencería debe convertirse en parte importante de tu filosofía deportiva ?!